
¿Te atreves a crear un huerto urbano? Son muchas las personas que, al no contar con una parcelita o jardín, aprovechan zonas como balcones para plantar sus flores y vegetales favoritos.
Si estás pensando en generar tu propio huertito o jardín en el balcón, aquí te ayudaremos en todo. Desde las semillas, qué necesitas para plantar, como cuidar tu huerto urbano en casa y más.
¿Y qué tiene que ver un huerto urbano con la supervivencia? Pues mucho. En cuanto a mejores plantas para huerto urbano, puedes plantar desde pequeñas hortalizas, hasta plantas aromáticas y que puedes emplear para curar y cuidarte. Te permitirá no solo fomentar habilidades como paciencia o el bienestar, sino también incentivar el autoconsumo.
Aprende más sobre “hazlo tú mismo” en nuestra sección Manualidades y DIY.
Qué es un huerto urbano
Un huerto urbano se trata de un espacio de cultivo que aplica en zonas urbanas, como pisos, balcones, terrazas pequeñas, etc. En este sentido, tanto el espacio para plantar como la tierra en sí son escasos. Al contrario que la agricultura tradicional, estos mini huertos se adaptan a cualquier espacio disponible, mediante macetas, jardineras, recipientes reciclados o sistemas hidropónicos. Como objetivo, no solo busca proveer alimentos frescos, sino también generar un entorno más sostenible, estético y saludable en la ciudad.
Este tipo de huerto ha ganado importancia en los últimos años, debido a la necesidad de contar con alimento fresco en caso de emergencia, la reducción de la huella de carbono y el interés por volver a reconectar con la naturaleza. Cultivar plantas y vegetales permite conocer los métodos de cultivo, evitando pesticidas y favoreciendo la biodiversidad urbana.
En general, un huerto urbano no necesita grandes conocimientos previos. Con un poco de planificación y los recursos adecuados, cualquier persona puede iniciarse en este mundo. En segundo lugar, se pueden adaptar a cualquier espacio y presupuesto, pudiendo crecer de manera modular, desde un pequeño jardín con hierbas hasta cultivos más grandes con frutas, verduras y flores comestibles. Además, cultivar en la ciudad fomenta la creatividad, experimentar con diseños verticales, hidroponía o diseñar un huerto urbano con materiales reciclados para optimizar el espacio.
En resumen, un huerto urbano combina productividad, sostenibilidad y bienestar. No solo proporciona alimentos, sino que también ofrece beneficios psicológicos, como reducir el estrés, mejorar la concentración y fortalecer la autosuficiencia. En entornos urbanos densos, donde la naturaleza es limitada, la permacultura y estos pequeños oasis verdes son un recurso invaluable tanto para la supervivencia alimentaria como para el equilibrio emocional.
Huerto urbano aplicado a la supervivencia
Más allá de la estética o de la alimentación ecológica, los huertos urbanos pueden convertirse en herramientas de supervivencia. En situaciones de crisis como desastres naturales o escasez de alimentos, disponer de un espacio donde cultivar tus propios vegetales puede marcar la diferencia. Este tipo de huerto se centra en la autosuficiencia, priorizando cultivos que garanticen alimentos nutritivos durante todo el año y que puedan resistir a condiciones adversas.
Pero para conseguirlo, la planificación es esencial. Se recomienda seleccionar especies con alta productividad y valor nutricional (lechugas, rábanos, espinacas, tomates, calabacines y hierbas aromáticas), así como la rotación de cultivos y el uso de semillas resistentes. Esto asegura que el huerto continúe siendo productivo sin agotar los nutrientes del sustrato. En espacios reducidos, utilizar los sistemas verticales o hidropónicos optimizan el rendimiento, permitiendo cosechas más frecuentes y mayor variedad de plantas.
El huerto urbano de supervivencia también promueve resiliencia alimentaria y psicológica. Aprender a cultivar y conservar alimentos fortalece la autonomía y reduce la dependencia de sistemas externos, lo que vital para la preparación en emergencias.
Otro aspecto crítico es el almacenamiento y conservación. Complementar el huerto con técnicas como deshidratación, fermentación o conservación en frío permite mantener reservas a largo plazo. Así, un huerto urbano bien diseñado no solo es un espacio verde, sino un recurso estratégico que combina alimentación, educación práctica y seguridad alimentaria.
Para saber más, puedes ver esta Guía de Oxfam Intermón

Tipos de huerto urbano
Los huertos urbanos se pueden clasificar en función del diseño y el sistema de cultivo para adaptarse al espacio, los recursos y las necesidades del usuario. Conocer los diferentes tipos ayuda a elegir mejor opción para cada situación y objetivo. Cualquiera sirve para mejorar la jardinería urbana y cuidar tus plantas favoritas sin renunciar a la eficacia y al diseño.
Huerto en macetas
Los huertos en macetas son perfectos para principiantes y espacios pequeños. Permiten controlar el sustrato, el riego y la exposición solar, facilitando el cuidado de las plantas. Se pueden utilizar macetas de barro, plástico o cerámica, según la estética y el presupuesto. Para optimizar el crecimiento, se recomienda usar sustratos ricos en nutrientes y asegurarse de que las macetas tengan buen drenaje.
Este tipo de huerto es flexible: las plantas se pueden mover para aprovechar la luz o protegerlas de condiciones adversas. Además, las macetas permiten cultivar diferentes especies de manera separada, lo que evita enfermedades y facilita la cosecha. Son especialmente útiles para hierbas aromáticas, lechugas y tomates cherry.
Ejemplos de huertos en macetas:
Vertical
El huerto vertical optimiza el espacio usando paredes o estructuras de soporte. Puede implementarse con jardineras apiladas, estanterías o sistemas de bolsillos de tela. Este método es ideal para balcones, patios o interiores con poca superficie horizontal. Permite cultivar más plantas en menos espacio y facilita la irrigación controlada.
Además de la productividad, aporta valor estético, creando un “muro verde” que mejora el ambiente. Es recomendable elegir plantas ligeras y de crecimiento rápido, como lechugas, fresas o hierbas aromáticas. Los sistemas automáticos de riego pueden incrementar la eficiencia y reducir el esfuerzo diario.
- TecTake® Huerto Vertical con 4 Niveles (madera)
- TecTake® Jardinera Vertical Compacta con 4 Macetas (plástico)
- Mr. Stacky – Maceta apilable de 5 Niveles para Fresas, Hierbas, Flores y Verduras
- Macetero vertical Prosperplast Mini Cascade de plástico en color blanco
- EVERTIA Jardín Vertical, Macetas para Jardines Verticales Naturales
Hidropónicos
El huerto hidropónico utiliza agua enriquecida con nutrientes en lugar de tierra. Las plantas se cultivan en sustratos inertes como lana de roca o fibra de coco, recibiendo directamente lo que necesitan para crecer. Este sistema ofrece alta productividad y permite cultivos continuos, ideales para quienes buscan eficiencia y ahorro de espacio.
Requiere inversión inicial mayor y conocimientos de nutrición vegetal, pero reduce problemas de plagas y enfermedades. Es posible implementarlo en interiores con iluminación artificial, garantizando cosechas durante todo el año, lo que lo hace perfecto para un huerto urbano de supervivencia.
Materiales reciclados
Utilizar materiales reciclados permite crear huertos urbanos sostenibles y económicos. Botellas de plástico, cajas de madera, palets o incluso neumáticos pueden convertirse en jardineras, estructuras verticales, mini huerto en botella o sistemas de riego. Este enfoque reduce costes y añade creatividad al diseño.
Eso sí, los materiales reciclados requieren limpieza y acondicionamiento para evitar contaminantes que afecten a la planta. Además, permiten experimentar con distintas formas y tamaños, adaptando el huerto a cualquier espacio.

Materiales para crear un huerto urbano
Comenzar un huerto urbano en el balcón o en el interior necesita de planificación y materiales básicos. Disponer de los recursos idóneos facilita el proceso de siembra, su crecimiento y la posterior cosecha. Ayudando a evitar problemas comunes y mejorando la productividad.
Qué plantar en un huerto urbano
Lo primero de todo es saber que contamos con dos opciones de semilleros en viveros para que crezcan las plantas de exterior. Estas se dividen en plantones y semillas:
Comprar semillas en sobre
Una opción para los huertos ecológicos pequeños es contar con semillas que se van a plantar directamente en la tierra, ya sea en una maceta o semillero. Para tener más información, lee las instrucciones en el sobre o pregunta a un experto.
Para empezar un huerto urbano desde cero, puedes seguir los siguientes consejos:
- El agujero donde vas a introducir la semilla ha de ser, como mínimo 3 veces más el tamaño de esta.
- Las semillas de gran tamaño se siembran por grupos de 2 o 3 ejemplares.
- Las más pequeñas se plantan lanzando un puñado sobre el sustrato.
- Para mejorar la germinación y evitar los efectos negativos de la climatología, puedes presionar ligeramente la tierra con la palma de la mano tras la siembra (no presiones demasiado, las semillas necesitan también oxígeno y espacio.
Ejemplos para comprar:
- Nojus – 14 paquetes de semillas de hierbas variadas (orégano, tomillo, romero, lavanda, albahaca y más.
- ZenGreens® – Semillas germinadas eco set de 20(col rizada, brócoli, trébol rojo, mostaza blanca, lenteja roja, trigo, colza, judía adzuki, alfalfa, Asia mix, nutri mix, rúcula, girasol, mix ensalada, guisante, frijoles y rábanos).
- Semillas de hierbas medicinales – 12 variedades de hierbas (milenrama, artemisa, hierba de san juan, ajenjo, manzanilla, toronjil, salvia, tomillo, valeriana, agripalma, romero y menta).
- ZenGreens® – Set de semillas de verduras bio – 15 variedades (calabacín, pimiento morrón, tomate de ensalada, zanahoria, pepino, berenjena, remolacha roja, cebolla, brócoli, col negra, espinaca, tomate Cherry, lechuga iceberg y rabanitos).
- Mascarell Semillas, PACK SEMILLAS HUERTA OTOÑO-INVIERNO (brócoli, repollo, coliflor, escarola y remolacha)
Comprar plantones
Los plantones son semillas que han crecido durante un tiempo. Podemos conseguirlos tras plantar las semillas o comprarlos en el mercado. Si compramos los plantones (son un poco más caros), tendremos mejores resultados y en menor tiempo. Y más si no tienes experiencia en la siembra.
Cuando realices la plantación, ten en cuenta la distancia entre los distintos plantones para que crezcan de manera adecuada.
Contendores
Los contenedores son esenciales. Para huertos en macetas o reciclados, se pueden usar macetas de distintos tamaños, cajas de madera, botellas o jardineras. En huertos verticales, se recomiendan estanterías, bolsillos de tela o estructuras modulares. Para hidroponía, se necesitan bandejas, depósitos de agua y tubos de riego.
Jardineras y macetas
La mayoría de estos cubículos son fabricados a base de PVC o bioplástico y podemos encontrar amplia variedad de tamaños y formas. Además, al contar con un alto número de opciones, son más baratos y se pueden usar también para huertos verticales.
Hay algunos modelos que añaden un depósito pequeño de agua que permite el riego por capilaridad. Estos son bastante útiles si no somos expertos o nos vamos de viaje.
Cajones de cultivo
Están habitualmente fabricadas en madera, que está tratada para soportar las inclemencias del clima si están al aire libre. Pueden ser de forma rectangular, cuadrada y de distintos tamaños. En su interior cuentan con un recubrimiento de geotextil para mantener la madera en buen estado ante la humedad.
Así mismo, hay modelos con varios compartimentos que nos permiten plantar distintos cultivos, aunque es cierto que son más caros. La decisión es tuya.
Sacos de rafia
Normalmente, no se suele emplear los sacos de rafia para crear un huerto en terraza, pero pueden ser útiles al ser ligeros y transportar fácilmente. De igual modo, están compuestos de geotextil resistente y, como en el caso anterior, hay modelos con varios compartimentos para realizar distintas plantaciones.
Mesas de cultivo
Es el contenedor que se puede encontrar con más asiduidad en huertos urbanos en terrazas y azoteas. Y esto tiene una explicación sencilla: cuentan con un tamaño reducido, con cómodos de utilizar y no conllevan la pérdida de agua.
Están fabricados en materiales como PVC o madera, en diferentes colores y resisten bien a los rayos UV. A nivel estético, quedan bien en todo tipo de decoración de exterior.
Por último, algunos modelos incluyen soporte para dejar las herramientas para cultivar y disponen de separadores para la distribución de las plantaciones.

Recipientes verticales
Para sacar el máximo provecho a espacios pequeños, existen estructuras verticales que permiten cultivos y crear un mini huerto en las pareces. Cuentan con diseños que se adaptan bastante bien a todo tipo de paredes y decoración. Se pueden usar tanto en balcones, terrazas como en el interior de las viviendas.
Así mismo, con autoportantes y se drenan fácilmente, al ser fabricados con materiales resistentes y respetuosos.
Sustratos
El sustrato es clave para un buen desarrollo vegetal. Se recomienda tierra de calidad o mezclas específicas con compost y perlita para macetas. En hidroponía, se usan sustratos inertes como fibra de coco o lana de roca, que sostienen las raíces y permiten un flujo eficiente de nutrientes.
Un buen sustrato ha de garantizar:
- Sujeción a la planta.
- Que las plantas cuenten con oxígeno en las raíces
- Que la huedad tengan una adecuada retención
- Nutrientes extras que ayudan al crecimiento de la planta
El sustrato lo usaremos a la hora de realizar la plantación y podemos encontrar de dos tipos:
- Sustrato universal. Está adaptado a todo tipo de plantas y está compuesto de turba, restos vegetales, abono NPK (nitrógeno, fósforo y potasio) y compost.
- Sustratos específicos. Estos sustratos están destinados a un tipo determinado de planta o cultivo. Así mismo, cuentan con niveles más altos de nutrientes adaptados (fibra de coco, turba, compost. Etc.). Un ejemplo es la turba, que es ideal para cactus y suculentas.
Tipos de sustratos
| Tipo | Composición | ventajas | Usos | Extra |
| Sustrato universal | Mezcla equilibrada de turba, compost, fibra de coco y perlita o vermiculita. | Versátil para la mayoría de las plantas. Buena aireación y retención de agua.Disponible en cualquier tienda de jardinería. | hortalizas de hoja, plantas de interior, semilleros y jardineras | revisa que sea de pH neutro o ligeramente ácido (6–7). Enriquece con compost cada 3–6 meses para mantener nutrientes |
| Turba (rubia o negra) | Materia orgánica semidescompuesta de turberas | Ligero y esponjoso.Retiene bien el agua y cuenta con buena estructura. | Turba rubia. Es más ligera y ácida (pH 3,5 -) ideal para plantas como arándanos y hortensias.Turbia negra. Más densa con pH neutro, adecuada para mezcla base | su extracción no es sostenible → sustituye por fibra de coco o compost si buscas una opción ecológica. |
| Fibra de coco | Residuos naturales del coco triturados y lavados | 100% ecológica y renovable.Excelente aireación y capacidad de retener humedad.Favorece el desarrollo radicular. | Mezclas ligeras, cultivos hidropónicos y germinación | Combina 70% fibra de coco + 30% compost para huertos urbanos. |
| Compost | Materia orgánica descompuesta (restos vegetales, estiércol, hojas, etc.). | Nutre de forma natural y mejora la microbiota del suelo.Sostenible y gratuito si lo produces tú. | Mejorar sustratos pobres o como base de cultivo orgánico. | No uses compost sin madurar; puede quemar raíces por exceso de amonio. |
| Perlita y vermiculita | La perlita es roca volcánica expandida (mejora la aireación y drenaje).Vermiculita. Mineral que retiene el agua y nutrientes | Regula la humedad del sustrato.Evita la compactación | Semilleros, mezclas ligeras o sistemas hidropónicos. | Mezcla 10–20% perlita + 10% vermiculita en sustratos universales para óptimo rendimiento. |
| Humus de lombriz | Excremento de lombrices rojas (Eisenia foetida). | Altamente nutritivo, rico en microorganismos beneficiosos.Mejora la estructura y el drenaje. | Fertilizante orgánico de mantenimiento (mezcla 20–30% con sustrato base). | No lo uses solo; su textura retiene demasiada humedad y puede ahogar raíces. |
Mezclas recomendadas según uso
🌱 Mezclas ideales según el tipo de cultivo
| Tipo de cultivo | Mezcla ideal |
|---|---|
| Aromáticas | 60% sustrato universal + 30% compost + 10% perlita |
| Hortalizas de hoja | 50% fibra de coco + 40% compost + 10% vermiculita |
| Frutos (tomates, pimientos) | 50% tierra + 30% compost + 20% perlita |
| Cactus y suculentas | 50% arena de río + 30% turba negra + 20% perlita |
| Hidropónicos | 100% fibra de coco o perlita con solución nutritiva |
Los abonos para huertos
Actualmente, podemos hallar abonos específicos en el mercado y de una forma muy sencilla. Los abonos tienen como misión fertilizar la tierra para que podamos obtener una buena cosecha y de mayor calidad. La mayoría están compuestos por una base orgánica que apuesta por una agricultura ecológica gracias a su formulación.
En general, podemos distinguir 3 tipos de abonos adaptados a huertos urbanos:
- Abonos granulados. Son abonos que se aplican en torno a la planta y que se van disolviendo lentamente por el agua de riego y el paso del tiempo. Sus nutrientes son absorbidos por las raíces.
- Abonos compostados. Son los más naturales, siendo ejemplos el humus de lombriz, estiércol de caballo o vaca, compost vegetal, etc. Se reparten como una fina capa por encima del sustrato o en una capa intermedia.
- Abonos líquidos. Se disuelven dentro del agua de riego y se destacan por ser fertilizantes prácticos y con un efecto rápido gracias a su veloz absorción por las raíces.
- Abonos inorgánicos. También llamados químicos, no se suelen aplicar en huertos pequeños o urbanos, pero puedes hallarlos en el mercado en formato líquido o granulado.
Sistemas de Riego
El sistema de riego asegura que las plantas reciban agua suficiente sin exceso. Desde regaderas manuales hasta sistemas por goteo, es importante ajustar la frecuencia y la cantidad en función de la especie y la estación del año. En huertos urbanos, tanto plantas como hortalizas cultivadas en contenedor requieren más agua que aquellas que viven directamente en el suelo.
Guía de riego para huertos urbanos:
- Los riegos han de ser frecuentes y cortos, aunque con menos cantidad para no ahogar las raíces.
- No se recomienda regar con presión, es mejor aplicar regaderas para que el agua caiga suavemente.
- En función del tipo de cultivo, se ha de ajustar la duración y frecuencia del riego. Así como tener en cuenta variables como momento del desarrollo, estación del año y meteorología.
- El horario de riego varía según época del año. En verano, ser recomienda regar a primera hora de la mañana o al ponerse el sol. Sin embargo, en invierno, otoño y en primavera es mejor en las horas centrales del día para una mejor absorción del agua.
- Cualquier maceta ha de contar con un agujero inferior que permita drenar el exceso de agua.
- Es importante no mojar las hojas, flores y frutos para que no se pudran o aparezcan hongos.
Si no te gusta mucho las típicas regaderas, puedes siempre hacerte con un sistema de riego por goteo, que es más completo y tendrás un mejor control sobre el riego. Los modelos de riego automático bien es cierto que son más caros, aunque la inversión se recupera al aprovechar mejor el agua y regar de forma menos constante.
Eso sí, debido a su complejidad, es mejor contar con un profesional para que lo instale o lee bien las instrucciones de instalación.
Herramientas y otros
Otros materiales complementarios incluyen fertilizantes orgánicos, herramientas básicas como paletas, tijeras de podar y guantes, así como soportes para plantas trepadoras. En huertos urbanos de supervivencia, también es útil contar con etiquetas, medidores de pH y recipientes para almacenar semillas.
Herramientas básicas (imprescindibles)
Estas son las que todo huerto urbano necesita, sin excepción:
- Pala de mano: para trasplantar, cavar y mover sustrato. Lo ideal es que sean de acero inox. Y con mango ergonómico.
- Rastrillo pequeño o cultivador: airea la tierra y evita compactación. Ideal para macetas grandes o jardineras.
- Tijeras de podar o de jardín: esenciales para cortar hojas secas, podar y cosechar sin dañar. Como truco, desinfecta con alcohol antes de que cada uso para evitar hongos.
- Guantes de jardinería: protegen de cortes, espinas y tierra. Elige modelos transpirables y antideslizantes.
- Regadera con boquilla fina o pulverizador: asegura un riego suave y uniforme. En caso de contar con un huerto interior, utiliza mejor una botella adaptada o un difusor desmontable.
Herramientas intermedias (más de 4 macetas o jardineras grandes)
- Paleta ancha: facilita mezclar compost o sustrato.
- Transplantador o plantador cónico: crea huecos para semillas o plantel con precisión.
- Pulverizador de presión o mochila pequeña: ideal para aplicar fertilizantes líquidos o repelentes naturales.
- Cepillo o escoba de mano: mantiene limpia la zona del huerto y previene plagas urbanas (hormigas, caracoles).
- Cuchillo de injerto o multiusos: práctico para cortar raíces o separar plantones.

Protección de cultivos
Por último, la protección de cultivos es importante. Mallas antiinsectos, pequeños invernaderos o cobertores plásticos ayudan a prevenir plagas y daños climáticos, especialmente en espacios urbanos con exposición a viento o contaminación.
Con estos materiales, cualquier espacio urbano puede transformarse en un huerto eficiente, productivo y estéticamente agradable, adaptado a las necesidades del usuario y al tipo de plantas cultivadas.
Mallas antiinsectos
Actúan como barrera física frente a moscas, pulgones, mosquitos y mariposas. Además, permiten el paso de la luz y el aire, sin tener que emplear productos químicos. Lo ideal es sujetarlas con pinzas, bridas o tubos de PVC formando un arco sobre la jardinera.
Mini invernaderos y túneles
Crean un microclima controlado que mantiene temperatura y humedad constantes. Tienen la ventaja de que se extienden en la temporada de cultivo y ayudan a proteger ante el viento y la contaminación urbana. Como consejo, abre los laterales durante el día para ventilar y así evitar la proliferación de hongos.
Las opciones según el espacio disponible:
- Mini invernadero vertical: estructura con varios niveles, ideal para terrazas o balcones.
- Túneles de plástico o PVC: perfectos para proteger hileras de cultivos bajos.
- Cúpulas individuales: cubren macetas o plantas específicas durante heladas o lluvias fuertes.
Productos de ejemplo:
Cobertores plásticos y protectores de lluvia
Resguardan las plantas de lluvias intensas, granizo o viento fuerte. Son ideales para implantar en terrazas o azoteas con corrientes de aire y se pueden adquirir en el mercado o crear a base de botellas PET cortadas o láminas de plástico recicladas. Tenemos varios tipos:
- Plástico transparente grueso (0,15 mm o más): impermeable y resistente.
- Tela plástica microperforada: permite ventilación sin condensación.
Ejemplos:
Barreras contra viento y contaminación
Reducen el impacto del aire seco, polvo o gases de escape. Además de proteger, mejoran la estética del huerto y crean un entorno más íntimo. Entre los materiales recomendados:
- Paneles de bambú o brezo natural (decorativos y funcionales).
- Biombos de mimbre o redes de jardín.
- Cristales o policarbonatos transparentes para terrazas altas.
- Urfence Su Oasis: 90×600 Valla Jardín Bambú Natural
- Relaxdays Bordura de Jardín Madera, Borde Césped
- UrFence 300×30 Valla de Mimbre Enrollable
- BONERVA | Mimbre Natural Ecológico
Herramientas complementarias de mantenimiento
Además de las estructuras, hay pequeñas herramientas que facilitan la protección y el control de daños:
- Pinzas y bridas reutilizables: para fijar mallas y cobertores.
- Termohigrómetro: controla la temperatura y humedad dentro del invernadero.
- Trampas adhesivas amarillas: detectan y reducen poblaciones de insectos voladores.
- Pulverizador manual: permite aplicar repelentes naturales (neem, jabón potásico, infusión de ajo o menta).
- Estacas o arcos de PVC: sirven de soporte para mallas o túneles protectores.
Alternativas recicladas (low-cost y sostenibles)
En un huerto urbano, la creatividad vale tanto como la herramienta:
- Cucharas o cazos. Sustituyen muy bien a palas pequeñas.
- Botellas perforadas. Se pueden convertir en sistemas de riego por goteo.
- Palillos de madera. Aparte de utilizarse en barbacoas y pinchos, puedes utilizarlos como tutores para plántulas.
- Tapones y etiquetas recicladas. Utilizándolos bien pueden servir como señaladores de cultivos.
- Cajas de fruta. Funcionan como mini-mesas de cultivo y contenedor de las herramientas para su guardado posterior a la siembra y cultivo.
Como consejo, los utensilios de acero, madera o bambú duran años y resisten el sol.
Qué plantar en un huerto urbano
La selección de plantas que puedes sembrar en tu huerto urbano depende del espacio disponible, la exposición solar, el tipo de huerto y las necesidades de alimentación o estética. Elegir bien las especies garantiza cosechas productivas y un huerto saludable.

Plantas más habituales
Las plantas más comunes en huertos urbanos son ideales por su resistencia, rápido crecimiento y adaptabilidad:
- Hierbas aromáticas: Albahaca, perejil, romero, menta, tomillo y cilantro. Son fáciles de cultivar en macetas y jardineras, requieren poco espacio y aportan beneficios culinarios y medicinales.
- Verduras de hoja: Lechuga, espinaca, acelga y rúcula. Crecen rápido, permiten cosechas sucesivas y son perfectas para huertos pequeños.
- Pequeños frutos: Tomates cherry, fresas, frambuesas en macetas y pimientos. Aunque requieren más cuidados, ofrecen frutos dulces, nutritivos y visualmente atractivos.
- Otros cultivos complementarios: Rábanos, zanahorias pequeñas, guisantes y judías verdes, que se adaptan a contenedores medianos o verticales.
Puntos clave:
- Elegir especies resistentes reduce el riesgo de pérdidas.
- Combinar hierbas, hojas y frutos genera diversidad nutricional y estética.
- Las cosechas rápidas mantienen la motivación y permiten experimentar con nuevas especies.

Tipos de plantas según estación
La estación influye directamente en la supervivencia y productividad del huerto urbano. Adaptar los cultivos al clima y a la luz solar disponible asegura cosechas continuas y evita pérdidas:
- Primavera-verano: Tomates, pimientos, calabacines, pepinos y albahaca. Necesitan luz intensa y temperaturas cálidas.
- Otoño-invierno: Espinaca, acelga, coles, rábanos y lechuga de invierno. Son más resistentes al frío y se desarrollan con menor intensidad lumínica.
- Transición de estaciones: Plantas como zanahorias, guisantes y hierbas aromáticas resistentes pueden sembrarse al final del verano o inicio de otoño para prolongar la cosecha.
Puntos clave:
- Planificar según estación maximiza el rendimiento y evita desperdicio.
- Sembrar en ciclos permite mantener producción constante.
- Algunas especies pueden protegerse con cobertores o pequeños invernaderos para extender su ciclo de cultivo.
Tipos de plantas según espacio
El tamaño y tipo de huerto determina qué especies se pueden cultivar de forma eficiente:
- Balcones y macetas pequeñas: Ideal para hierbas aromáticas (albahaca, menta, perejil), lechugas y rábanos. Requieren poco sustrato y se pueden mover según la luz.
- Huertos verticales: Perfectos para plantas trepadoras como guisantes, judías, algunas variedades de pepino y fresas en bolsillos de tela. Aprovechan la altura y multiplican la superficie cultivable.
- Sistemas hidropónicos: Permiten combinar varias especies, incluyendo hojas, frutos y hierbas, en un mismo espacio reducido. Son eficientes, productivos y perfectos para interiores.
Puntos clave:
- Adaptar la planta al espacio evita competencia por luz y nutrientes.
- Las especies compactas o trepadoras optimizan los metros cuadrados disponibles.
- La planificación del espacio permite cosechas escalonadas y diversidad de cultivos.

Si quieres crear tu propio huerto urbano de madera, sigue estos consejos de Bauhaus sobre Cómo hacer un huerto en la ciudad.
Cómo crear un huerto urbano paso a paso
Tal vez, tras todo lo visto estés un poco agobiado. ¡Pero no te preocupes por ello! Crear un huerto urbano es mucho más sencillo de lo que parece. A continuación, te mostramos un paso a paso claro, práctico y fácil de seguir para que tu huerto urbano tenga éxito.
Define el objetivo (MVP)
Antes de ponerte manos a la masa tienes que preguntarte: ¿Para qué quiero un huerto urbano? ¿Lo quiero para conseguir verduras u hortalizas? ¿O prefiero plantas culinarias?
- Decide 1 o 2 objetivos (hierbas + lechuga, plantas aromáticas + especias).
- Prioriza teniendo en cuenta el espacio. Si tienes un espacio limitado, aplica la siembra a plantas aromáticas y verduras con hoja (lechuga, col). Si cuentas con más espacio, puedes plantar frutos y hortalizas.
¿Y por qué hacer todo esto? La respuesta es sencilla. Tendrás los objetivos claro, lo que te llevará a cometer menos errores y realizar compras innecesarias.
Evalúa espacio y luz
Aquí tienes que valorar de cuánto sol directo dispones en tu hogar y qué microclima está presente. Es decir, observa cuántas horas de sol directo recibes (en la mañana, tarde y cuánta sombra).
También toma nota de del viento, el nivel de contaminación urbana, los animales presentes en el espacio urbano, etc. Por ejemplo, puedes seguir esta pauta en cuanto a qué sembrar según horas de sol:
- Menos de 4 horas: hierbas de sombra y hojas.
- 4 a 6 horas: verduras.
- Más de 6 horas: tomates y pimientos.
Elige el formato (macetas / vertical / hidropónico)
En general, escoger el formato de tu huerto urbano dependerá de lo que te guste más. Hay multitud de diseños y opciones para tu hogar. Eso sí, en función de lo que elijas, te conviene más contar con macetas, jardineras, bolsas de rafia o envases hidropónicos.
- Si tienes un balcón pequeño es mejor tener macetas y jardineras, ya que se pueden adaptar fácilmente y tienen muchos tamaños.
- Si cuentas con una pared desnuda o un pozo pequeño, seguro que te interesa un huerto vertical.
- Si las plantas sí o sí han de estar en el interior, puedes conseguir un kit hidropónico.
Compra materiales básicos
Un paso esencial para conseguir tu huerto pequeño es juntar todos los materiales necesarios para crearlo. Teniendo en cuenta los puntos anteriores, adquiere estos elementos imprescindibles:
- Macetas y jardineras (con drenaje).
- Sustrato universal, compost, perlita o humus.
- Semillas y plantones.
- Regadera, guantes, tijeras de podar, pala pequeña, etc.
También puedes conseguir los siguientes materiales para mejorar el proceso de plantación y cuidado:
- Malla antiinsectos.
- Soporte para trepadoras (si las tienes).
- Bandeja de reserva de agua.
- Medidor de pH o EC.
Y, si eres de los que no quieres hacer un gran gasto o primas lo reciclado, puedes conseguir cajas, botellas y palés reciclados.
Prepara los contenedores y el sustrato
Tan importante como el contenedor es el sustrato que funcionará como nutriente y espacio vital de tus plantas. Sigue los siguientes consejos:
- Añade una capa de drenaje (gravilla o piedras) si la maceta es bastante profunda.
- Mezcla de 60% de tierra de calidad + 30% compost + 10% perlita (ajusta en función de las especies).
- Rellena dejando unos 2-3 cm libres del borde.
Como consejos extra, al regar, el agua ha de salir por los agujeros en 1-2 minutos.
Planifica distribución y plantación
- Coloca las plantas más altas al norte (si vives en el hemisferio norte) para no provocar sombra en las más bajas.
- Agrupa según necesidad de riego y sol (no mezcles, por ejemplo, cactus con hortalizas).
- Decide si vas a sembrar semillas o plantones (las semillas son más baratas, pero los plantones son más rápidos en crecer).
- Una regla práctica es que, si plantas producto de horas (lechuga, col), la densidad sea alta. En caso de tomates y pimientos, aplica 20- 30 cm de distancia entre ejemplares.
Siembra y trasplante
Un paso esencial es el proceso de siembra y el de trasplante.
- Semillas. Respeta la profundidad de la tierra (2-3 veces el diámetro de la semilla). Mantén una humedad constante hasta germinación.
- Plantel. Cava un hoyo del tamaño del cepellón, afloja las raíces si están apretadas y planta a la misma profundidad en la maceta. Riega al trasplantar.
- Unas 48-72 horas tras el trasplante, las plantas han de levantar hojas. Si no es así, revisa el riego y la exposición al sol.
Riego inteligente
El riego conlleva el agua que necesita las plantas para sobrevivir. Así mismo, un buen riego asegura no solo que estén atendidas, sino también un ahorro. Es mejor un riego profundo y espaciado, que pulverizaciones constantes.
Riega hasta que salga por los agujeros inferiores (1-2 minutos tras el riego). Deja que la capa superior (2-3 cm) se seque entre riegos en especies que lo toleren. Una forma de lograr un riego inteligente y más eficiente es aplicar el goteo o el auto-riego. Así mismo, es la mejor opción si te vas de viaje.
La humedad del sustrato ha de estar entre el 20% – 30% según el tipo de planta. Si quieres más precisión, puedes adquirir un medidor.
Fertilización y sustrato vivo
- Añade compost maduro 1–2 veces al año.
- Fertiliza con sustratos orgánicos líquidos (té de compost, extracto de algas) cada 3–4 semanas para fomentar un crecimiento activo.
- Para conseguir la fructificación (tomates, pimientos), usa un fertilizante con un extra más de potasio y fósforo.
Eso sí, evita sobrefertilizar la tierra, ya que podrías quemar las raíces y también provoca problemas en el crecimiento de la planta.
Manejo de plagas y enfermedades en tu huerto urbano
No solo es importante la siembra y el crecimiento. El mantenimiento es vital. Después de todo, una planta sana es aquella que crece bien, con sus flores y frutos y carece de enfermedades, hongos y plagas.
Y no es nada complicado. El 80% del trabajo de mantenimiento y prevención consiste en que la planta tenga una buena ventilación, un riego eficiente y correcto y una buena rotación cuando toque. Para controlar las plagas y enfermedades, puedes aplicar:
- Jabón potásico para pulgones.
- Aceite de Neem para cochinillas.
- Eliminación manual de orugas.
- Introducción de mariquitas (elimina de forma natural otras plagas).
En caso de estar enferma, aíslala de otras y trátala antes de que pueda contagiar a otras plantas aledañas.
Como tips, si tu planta tiene hojas amarillas, el problema es el riego y el Ph. En caso de que tenga manchas, es porque hay hongos. En caso de que encuentres insectos visibles, intenta una rápida intervención para evitar que dañen otras plantas.
Mantenimiento diario/semanal
- Revisión rápida 2–3 veces/semana (hojas, insectos, humedad).
- Poda/raspado de raíces superficiales si hay compactación.
- Tutoraje de trepadoras y eliminación de hojas muertas.
- Establece 10–15 min, 3 veces por semana al mantenimiento. Es mejor que una revisión larga y esporádica.
Cosecha, conservación y registro
Muchas personas se lanzan a generar un huerto urbano y no saben cómo cosechar aquello que ha sembrado. Por ejemplo, en plantas aromáticas y especias, cuando estén en buen estado e ideal para el proceso de secado. En caso de lechugas y coles, cuando las hojas estén verdes y en su punto. En cuanto a frutas y hortalizas, en su punto de madurez.
Si hablamos de la conservación:
- Hierbas. Frescas o secadas.
- Verduras. Frescas en la nevera, fermentadas, deshidratadas.
Por último, si hablamos del registro, es importante:
- Anotar la fecha de la siembra.
- Proceso de germinación.
- La primera cosecha y los kilos/mes.
Este registro en último lugar te ayudará a optimizas la cosecha en temporadas siguientes.
Tu Checklist rápido para huerto urbano
- Objetivo claro
- Medición de luz y espacio
- Contenedores con drenaje
- Sustrato + compost + perlita
- Semillas/plantel adecuados
- Herramientas básicas + regadera
- Plan de riego y fertilización
- Sistema anti-plagas básico
Problemas frecuentes y soluciones rápidas
¿Pero cómo detectar que algo no anda bien en mis plantas y cómo solucionarlo?
- Plantas están flojas o amarillas. El riego no es suficiente o faltan nutrientes. Revista la humedad y aumenta suavemente la fertilización.
- Plagas (pulgones, ácaros). Pulveriza jabón insecticida, introduce depredadores o neem.
- Pocas flores/frutos. Existe falta de sol o hay un nitrógeno excesivo. Por ello, reduce la cantidad de nitrógeno y asegura más de 6 horas de sol.
- Hojas quemadas. Aparece cuando se produce una exposición al sol fuerte tras pasar planta a exterior. Como solución, aclimata gradualmente.
Kits de huerto urbano
Los kits de huerto urbano son soluciones todo en uno, pensadas para facilitar la creación de un huerto sin complicaciones. Incluyen generalmente macetas, sustrato, semillas y, en algunos casos, sistemas de riego básicos o instrucciones paso a paso. Su principal ventaja es que permiten iniciar un cultivo de manera rápida, práctica y con garantías de éxito, incluso para quienes no tienen experiencia previa.
Kits de hierbas aromáticas
Ideales para balcones, cocinas o alféizares. Suelen incluir plantas de rápido crecimiento y bajo mantenimiento como albahaca, perejil, menta, romero o cebollino. Además, aportan aroma y frescura al hogar, y permiten disponer de condimentos naturales todo el año. Muchos modelos incluyen maceteros decorativos o autorriego, pensados para uso interior.
Kits de verduras
Pensados para quienes buscan una pequeña autosuficiencia alimentaria. Contienen semillas de hortalizas de ciclo corto, como lechugas, rábanos, zanahorias baby, pimientos o tomates cherry. Algunos incorporan mini invernaderos o sistemas de iluminación LED, lo que amplía las posibilidades en entornos urbanos con poca luz natural.
Kits hidropónicos
Representan la versión más avanzada y tecnológica. Funcionan sin tierra, utilizando agua y nutrientes disueltos. Son limpios, eficientes y sostenibles, ya que consumen menos agua y espacio. Ideales para pisos o terrazas pequeñas, permiten cultivar durante todo el año y controlar el crecimiento de forma precisa.
Otros kits
Además, existen kits ecológicos (fabricados con materiales reciclados o biodegradables), kits para niños (educativos y sencillos), y kits modulares, que permiten ampliar el huerto según las necesidades.
Kits de huerto urbano que te ofrecemos en Supervivencia Lista
A continuación, te presentamos en Supervivencia Lista algunos kits de cultivo para huerto urbano. Toma nota para saber cuál es el ideal para ti.
Optimal Garden Kit de Cultivo de plantas aromáticas y culinarias
Mini Huerto Urbano para Interior – Kit de Cultivo de Plantas Aromáticas y Culinarias
PYEF CRAFTS Huerto Urbano Hierbas Aromáticas
PYEF CRAFTS Kit Cultivo XL Huerto Urbano Huerta en Terraza & Kit Autocultivo en Casa
BonPrime Kit de Cultivo Hierbas aromaticas

Errores comunes y cómo evitarlos
Iniciar un huerto urbano puede ser muy gratificante, pero existen errores frecuentes que comprometen la productividad y la salud de las plantas. Identificarlos y prevenirlos es clave para asegurar un cultivo exitoso.
- Falta de planificación del espacio y la luz. No todas las plantas requieren la misma cantidad de sol; colocar especies que necesitan luz intensa en lugares con sombra puede frenar su crecimiento o incluso matarlas. La solución es observar la orientación del balcón o ventana y ubicar cada planta según sus necesidades solares.
- Exceso o defecto de riego. Regar demasiado provoca pudrición de raíces y hongos, mientras que la falta de agua genera plantas débiles y cosechas pobres. Es recomendable conocer las necesidades de cada especie y, si es posible, usar sistemas de riego por goteo o regaderas con control.
- No nutrir adecuadamente el sustrato. La falta de fertilización limita el crecimiento y la producción. Se deben aplicar compost o fertilizantes orgánicos de manera equilibrada, respetando las instrucciones de cada planta.
- Ignorar plagas y enfermedades. Revisar las plantas regularmente y usar métodos preventivos, como mallas o repelentes naturales, ayuda a mantener la salud del huerto sin recurrir a químicos dañinos.
- Descuidar la rotación de cultivos y el mantenimiento reduce la productividad y agota el sustrato. Organizar el huerto, podar las plantas muertas y rotar especies garantiza un ciclo continuo de cosecha y un entorno saludable.
Evitar estos errores permite que un huerto urbano sea productivo, sostenible y satisfactorio, asegurando que los esfuerzos invertidos se traduzcan en alimentos frescos y un espacio verde funcional.
Tipos de plagas en el huerto urbano

Las plagas son un problema grave para plantas y para tu hogar. En general, puedes tratarlas tú mismo y terminarán desapareciendo con remedios orgánicos y ecológicos. Pero, sino eres capaz de terminar con ellas o se descontrolan, es mejor ponerte en manos de profesionales.
A continuación, te dejamos una tabla con una lista de plantas y la plaga que más suele atacarlas.

Una vez que detectes algún tipo de plaga en tus plantaciones (véase la tabla anterior), es hora de aplicar el remedio para combatirlas. A continuación, te detallamos cómo luchar con cada tipo de plaga:

Beneficios del huerto urbano
Los huertos urbanos ofrecen beneficios tangibles tanto a nivel individual como comunitario, combinando salud, sostenibilidad y bienestar psicológico. Cultivar alimentos propios en espacios reducidos permite acceder a productos frescos, nutritivos y libres de pesticidas, promoviendo una alimentación más saludable y equilibrada.
Sostenibilidad
A nivel ambiental, los huertos urbanos contribuyen a la sostenibilidad al reducir la huella de carbono asociada al transporte de alimentos, fomentar el reciclaje mediante macetas y estructuras reutilizadas, y mejorar la biodiversidad urbana. Las plantas también ayudan a purificar el aire y disminuir la contaminación, generando microclimas más agradables en la ciudad.
Beneficios psicológicos de un huerto urbano
En términos de beneficios psicológicos, el cuidado de plantas reduce el estrés, mejora la concentración y proporciona una sensación de logro. El contacto con la naturaleza, aunque sea limitado, actúa como un regulador emocional, fortaleciendo la resiliencia y el bienestar general. Además, cultivar un huerto urbano fomenta la creatividad y la paciencia, habilidades valiosas en la vida diaria y profesional.
Autosuficiencia
Otro aspecto destacado es la autosuficiencia. Tener un huerto propio permite producir alimentos de manera constante y económica, reduciendo la dependencia de supermercados y fomentando hábitos de consumo más conscientes. Incluso pequeños espacios pueden generar cosechas suficientes para complementar la dieta familiar.
Comunidad
Finalmente, los huertos urbanos fomentan la educación y el sentido comunitario. Son herramientas para enseñar a niños y adultos sobre nutrición, biología y sostenibilidad, y pueden fortalecer lazos sociales si se comparte el espacio con vecinos o en proyectos comunitarios.
En conjunto, los huertos urbanos combinan salud, productividad y bienestar emocional, convirtiéndose en aliados estratégicos tanto para la vida cotidiana como para la preparación ante situaciones de autosuficiencia.
Conclusión para tu huerto urbano
Los huertos urbanos no son solo una tendencia estética, sino una herramienta poderosa para mejorar la calidad de vida, garantizar alimentos frescos y promover la sostenibilidad en entornos urbanos. Desde macetas simples hasta sistemas hidropónicos complejos, cualquier espacio puede transformarse en un oasis verde funcional y productivo.
Planificar correctamente el tipo de huerto, las plantas a cultivar y los materiales necesarios es fundamental para maximizar resultados. Evitar errores comunes como la falta de riego, nutrientes o luz asegura cosechas exitosas y un entorno saludable. La elección de kits puede simplificar el proceso y motivar a principiantes a iniciar su propio proyecto de cultivo urbano.
Los beneficios son múltiples: acceso a alimentos frescos, reducción de la huella ecológica, bienestar psicológico, autosuficiencia y educación sobre alimentación y sostenibilidad. Además, cultivar un huerto urbano fortalece la creatividad, la paciencia y la resiliencia, habilidades que se trasladan a otros ámbitos de la vida.
Si todavía no tienes tu huerto urbano, ahora es el momento de dar el primer paso. Comienza con un pequeño proyecto, selecciona las plantas adecuadas para tu espacio y estación, y descubre cómo estos pequeños cultivos pueden transformar tu hogar y tu vida. Cada maceta, cada semilla y cada cosecha contribuyen a un estilo de vida más saludable, consciente y autónomo.
¡Empieza hoy tu huerto urbano! Explora kits, selecciona tus plantas favoritas y convierte tu balcón, terraza o ventana en un espacio productivo y sostenible. Cada pequeño esfuerzo es un gran paso hacia la autosuficiencia y el bienestar en la ciudad.
Preguntas Frecuentes sobre huerto urbano
Hierbas aromáticas como albahaca, perejil y menta, además de verduras de hoja como lechuga, espinaca y acelga, son ideales para principiantes.
Un pequeño balcón o ventana puede albergar macetas, jardineras verticales o sistemas hidropónicos compactos.
Sí, con protección adecuada, luz artificial o sistemas hidropónicos se pueden mantener cultivos durante todo el año.
Depende de la especie. Hierbas aromáticas y verduras de hoja pueden cosecharse en 4-6 semanas, mientras que tomates y pimientos tardan varios meses.
Sí, son prácticos para principiantes, incluyen todo lo necesario y reducen errores iniciales. También permiten experimentar antes de ampliar el cultivo.
Revisando las plantas regularmente, usando métodos preventivos como mallas o repelentes naturales y manteniendo el sustrato limpio y nutrido.
Depende de la especie y el espacio. Riego manual con control es suficiente para macetas pequeñas, mientras que sistemas por goteo automatizados optimizan huertos más grandes o verticales.
Descubre más desde Supervivencia Lista
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
